Hoy vamos a hablar sobre la reciente campaña de Fanta. En ella se cuenta una historia en la que dos adolescentes se disfrazan de “pardillos” para poder acercarse a las chicas de su instituto: Bigotillo y Espinillo.
http://www.youtube.com/watch?v=oN6-PxuIvyo
La verdad es que el anuncio en si es gracioso, entretenido… en definitiva, eficaz para llegar al público que se desea alcanzar. Pero, ¿cuáles son las consecuencias para la demás población? Este anuncio hace referencia a un tópico (por desgracia), que es los estudiantes y las estudiantes que sufren las dejaciones, los insultos, los desprecios de los adolescentes guapos, actuales y modernos.
Ante esta campaña, todo este colectivo (que aunque es minoritario, existe) puede sentirse afectado, humillado o simplemente identificado. Aquí llegamos al punto en el que entran en juego más factores además de los intereses de Fanta como anunciante. ¿Es ética esta campaña? ¿Hasta qué punto le interesa a Fanta que este fragmento del mercado se sienta ofendido? ¿Es buscada por Fanta esta polémica? O por el contrario, ¿es un anuncio inocente que no pretende ni busca nada de lo anteriormente comentado? ¿Se ha tenido en cuenta a todo este colectivo?
Son muchas las preguntas que nos planteamos. Y las respuestas… pues bueno, es como todo, depende de cómo se mire.
Os dejamos reflexionar.
http://www.youtube.com/watch?v=oN6-PxuIvyo
La verdad es que el anuncio en si es gracioso, entretenido… en definitiva, eficaz para llegar al público que se desea alcanzar. Pero, ¿cuáles son las consecuencias para la demás población? Este anuncio hace referencia a un tópico (por desgracia), que es los estudiantes y las estudiantes que sufren las dejaciones, los insultos, los desprecios de los adolescentes guapos, actuales y modernos.
Ante esta campaña, todo este colectivo (que aunque es minoritario, existe) puede sentirse afectado, humillado o simplemente identificado. Aquí llegamos al punto en el que entran en juego más factores además de los intereses de Fanta como anunciante. ¿Es ética esta campaña? ¿Hasta qué punto le interesa a Fanta que este fragmento del mercado se sienta ofendido? ¿Es buscada por Fanta esta polémica? O por el contrario, ¿es un anuncio inocente que no pretende ni busca nada de lo anteriormente comentado? ¿Se ha tenido en cuenta a todo este colectivo?
Son muchas las preguntas que nos planteamos. Y las respuestas… pues bueno, es como todo, depende de cómo se mire.
Os dejamos reflexionar.